martes, 25 de diciembre de 2012

Only skin and bonnes

Caminaba entre las aguas cristalinas y contemplaba su tembloroso reflejo. A la luz de la luna, blanca como un fantasma se lamentaba y preguntaba una y otra vez cual podría ser su destino, de que estaba hecha y para que servía su camino. Solo cabía recordar en su memoria lo efímera que era la vida y el dolor que cada minuto sentía al vivirla. Quería morir pronto, alejarse ya de todo, desencantada de la vida pues no tenía motivos para seguir luchando. En esencia, ella no era más que un suspiro y  el mundo después terminaría con ella dejando solo su piel y sus huesos...

1 comentario:

  1. ¡Hola, tocaya! La verdad es que se me ha puesto la piel de gallina al leer este relato. Muy bien redactado!

    Besos

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